Abstract
La reflexión levinasiana surge como una crítica a la filosofía tradicional que, al estar basada en la presencia y la identidad, conduce a la exclusión del otro. Frente a un pensar onto-lógico, el lituano propone que la ipseidad del ser humano sea constituida por la alteridad, y lo sea éticamente, porque el sujeto es sujeto-a, es decir, responsabilidad. En un intento por llevar aún más allá la obligada atención a la otredad del otro, Derrida desarrollará una crítica radical a la postura levinasiana. Deconstrucción de todo rastro de ipseidad y soberanía en la relación con el otro, la lectura de la obra de Derrida aquí realizada apuesta por una concepción no definible de lo humano. De ahí que toda de-limitación de un ámbito ético como propiamente humano conlleve una violencia bestial que el levinasiano humanismo del otro pretendía superar.