Abstract
Entre 1843 y 1844, uno de los conceptos centrales del pensamiento de Karl Marx es el de ser genérico. Es indudable en este concepto la herencia terminológica feuerbachiana, cuya principal referencia es el concepto de género. Sin embargo, este trabajo muestra que en su funcionamiento el ser genérico, lejos prolongar el concepto feuerbachiano, implica su refutación. Esto permite comprenderlo en una problemática más amplia de la obra de Marx: el proceso histórico de sustitución de las interrelaciones fundantes de los cuerpos por su forma representada.