Abstract
Tras el Descubrimiento de América por Cristóbal Colón, para cuya empresa contó con la decisiva ayuda del dominico fray Diego de Deza, fueron los miembros de la Orden de Santo Domingo los primeros que lucharon por la justicia en la defensa de la dignidad del indígena en la conquista de América durante las primeras décadas del asentamiento español en el Nuevo Mundo y los que, con el debate teológico y filosófico, pusieron en cuestión los Justos Títulos de ocupación por parte de España de las lejanas tierras ultramarinas. También fueron los pioneros que intentaron poner en práctica la tesis evangelizadora aislacionista, seguida después por otras órdenes religiosas. Los nombres de Antonio Montesinos, Pedro de Córdoba, Bartolomé de las Casas, Francisco de Vitoria, Tomás de Berlanga, Domingo de Soto, Melchor Cano y tantos otros forman un grupo destacado de precursores que se adelantaron en el tiempo a la hora de proclamarse defensores de los Derechos Humanos.