Abstract

El presente artículo indaga en elementos centrales presentes en las exploraciones filosóficas realizadas por Simone Weil, entendidas estas en cuanto herramientas para conseguir una mayor comprensión de la experiencia humana. Muestra operaciones conceptuales que evidencian cómo su vida y escritura desenraizan el pensamiento de las ideas convencionales, buscando transformar nociones instaladas en la vida de las sociedades que, bajo el signo de la fuerza, propician el desmedro existencial y climático que caracteriza el presente. Para este fin se analiza el alcance político del lenguaje y de los cuerpos como fuente de significados en la conversación interseccional de las instituciones y en el interior de los colectivos cuyos dispositivos vuelven más reales las significaciones fijadas a los nombres que las cosas mismas a las que aluden, entendiendo que esta modalidad de fuerza impide el acceso a la verdad impersonal.