Abstract
Este artículo se propone mostrar, en contra de las interpretaciones dominantes, que Platón debió tempranamente postular la supervivencia del alma como un sujeto independiente de daño y beneficio moral con el objeto de completar su defensa de la ética socrática – en particular el principio de Soberanía de la Virtud, central en diálogos tempranos como la Apología, el Critón y el Gorgias. Al dualismo metafísico que resulta de este postulado le denomino ‘dualismo socrático’, para diferenciarlo del dualismo maduro expuesto por Platón en el Fedón.