Abstract
Mucho se ha escrito sobre la imposibilidad de representar el Holocausto como quiebra en el proceso civilizador. Sin embargo, la convocatoria al silencio pronto fue rota por una controversia de relatos que difieren en sí sustancialmente. Desde entonces, el debate sobre la pertinencia de narraciones de corte realista, melodramática o cómica, cuando no fantástica, su legitimidad o ilegitimidad y el uso de material de archivo en los filmes sigue generando importantes dudas a la hora de abarcar la representatividad del horror. Precisamente, al ser una cuestión de extremada sensibilidad para la historia en general y la europea en particular, el Holocausto no deja de interpelarnos con nuevos y antiguos interrogantes. Preguntas que se agudizan más si cabe a la hora de seleccionar fragmentos o filmes para trabajarlos desde el aula..