Abstract
El presente trabajo pretende mostrar la convergencia y continuidad, tanto de temática como de sentido, de dos obras centrales de María Zambrano publicadas en el año 1939 desde el análisis de dos categorías, realismo y racionalismo, con las que se identifica a España y el resto de Europa respectivamente. Así mismo, se busca poner de manifiesto que si bien para la pensadora el racionalismo desemboca en la angustia del sujeto moderno y contemporáneo por llevar asociada la forma del sistema, encontrará en el realismo y estoicismo, más característicos de la tradición hispana, la posible salida a esta angustia en la que se halla Europa a la altura de 1939.