Abstract
Desde la mirada de los estudios de la cultura y la hegemonía del poder esta investigación explora desde la perspectiva de sus habitantes, el sentir popular y la apropiación de la celebración religiosa de San Pedro y San Pablo en la parroquia Picoazá (Portoviejo – Ecuador). Para el fin se acude a la metodología cualitativa, utilizando la entrevista como herramienta de corte etnográfico. Los resultados plantean un colectivo apegado a la religión con connotaciones significativas en la organización social y cultural del entorno, dando paso a la reproducción de tradiciones heredadas de generación en generación. Las mismas que a la par, fetichizan y esencializan la actividad, e invisibilizan otros aspectos inherentes a las prácticas culturales.