Abstract
En el presente artículo se analizará, en primer lugar, la importancia de incorporar la dimensión social al análisis jurídico a partir de un enfoque interdisciplinario riguroso que permite articular las exigencias metodológicas de cada ciencia y así evitar el sincretismo (I). Luego, se desarrollará cómo la sociología de los valores de Nathalie Heinich puede resultar un marco teórico-conceptual relevante para dotar de racionalidad al discurso jurídico cuando se incorporan argumentos de naturaleza social (II). Finalmente, se planteará que lo expuesto en el punto anterior permite incorporar una herramienta relevante al momento de argumentar y de justificar la decisión de casos difíciles, dificilísimos y estructurales en los cuales, entre otros aspectos, deben emplearse principios jurídicos (III).