Abstract
Debido a la búsqueda de objetividad y universalidad de la estética filosófica como disciplina académica, la experiencia estética se ha visto enfrentada a la vida cotidiana, perdiendo el enriquecimiento de un contexto y su relación a valores morales, culturales y a la utilidad. Como consecuencia, la falta de reconocimiento de estos valores por parte de la disciplina académica ha conducido a una fragmentación de la experiencia estética que ha concluido en la ignorancia del papel que toma esta en el día a día. En el siguiente trabajo se pretende exponer la necesidad de reconciliar nuevamente la experiencia estética con la vida cotidiana a través del concepto de world-making de Yuriko Saito, que consiste en la comprensión del mundo como un proyecto común en el que todos contribuimos mediante las decisiones que tomamos en relación a la experiencia estética. Por otro lado, también se tratará de mostrar por que? tomar conciencia del lugar que tiene la experiencia estética en la vida cotidiana ayudaría a entender la relación que tenemos con el mundo, como consecuencia de la experiencia estética, a través de nuestra acción; y cómo, en definitiva, el impacto de nuestra acción en el mundo revierte sobre nosotros mismos por ser el mundo el sustento de nuestras oportunidades, y en definitiva, de nuestra vida.