Abstract
La copa del Santo Cáliz que se venera en Valencia está tallada en piedra de ágata, alternándose bandas bastante traslúcidas, de escasa tonalidad, con otras que podrían describirse como de color sardio. El sardio es la primera piedra del pectoral sacerdotal asociada a Rubén, el primogénito de Jacob. Es muy simbólico que esta copa, supuestamente empleada por Jesús en la Última Cena según la tradición, se asemeje en cierto modo al sardio, pues Jesús es el unigénito de Dios. Por otra parte, esta copa evoca una llama de fuego cuando se ilumina desde dentro, lo cual es también muy figurativo en relación con la Eucaristía.