Abstract
La comunicación que presentamos pretende mostrar las consecuencias que el sistema implementado por el sindicato agrícola Unió de Pagesos en Cataluña -por el que se realiza el reclutamiento, importación y suministro de mano de obra extranjera para el campo catalán- produce: un sujeto limitado en el justo goce de sus libertades y el legítimo ejercicio de sus derechos. La política migratoria la responsable del surgimiento de un sistema tal, cuyo germen está en la relación simbiótica Estado/Sindicato, cuyos intereses -la entrega just in time de la mano de obra y el control social del extranjero- se armonizan en su puesta en práctica. En los alojamientos, infraestructura del sistema, se procura la docilización de los individuos necesaria a su continuo suministro a través de variados dispositivos, entre ellos, normativas de alojamiento, supervisión constante y regímenes de visita