Abstract
Este texto analiza el caso Citizens United v. FEC en el que la Suprema Corte de los Estados Unidos, en decisión dividida, reconoció un derecho constitucional de las corporaciones a gastar de manera ilimitada en comerciales televisivos electorales. Por un lado, se revisan los precedentes judiciales más importantes respecto a los límites de la participación financiera e ideológica de las empresas en el contexto electoral. Por el otro, también da cuenta del contexto conservador existente en la Suprema Corte norteamericana al momento de dictarse la sentencia y del impacto que tiene, en términos prácticos, el hecho de que las corporaciones cuenten ahora con semejante derecho.