Abstract
El presente artículo aborda los engranajes entre escritura y ciudadanía que plantea el poemario de Elvira Hernández, Estado de sitio. Para ello, considera los factores de orden sociocultural que acompañaron su producción, circulación y recepción crítica, en el contexto del estallido social de octubre 2019 en Chile, la coyuntura feminista y el actual proceso constituyente. Hitos de nuestra historia reciente frente a los cuales la poeta se posiciona ética y estéticamente desde una concepción política de la palabra como litigio, esto es, una disputa –discursiva y social– por la enunciación de (en) lo común.