Abstract
Resumen: Todo hecho debe ser narrado para ser objeto de examen valorativo.
Pero este examen depende, en parte, de cómo aquél sea narrado.
Algunos autores han señalado el valor democrático que posee el
enfoque narrativo, en la medida en que permite que una narración sea
construida a partir de diferentes puntos de vista. El problema es que estos
puntos de vista pueden conducir a soluciones alternativas o incluso
antagónicas, fenómeno no infrecuente en una sociedad multicultural
como la nuestra. Desde un punto de vista estrictamente narrativo, el
mejor relato es el más persuasivo. Pero esto nos aboca al relativismo,
puesto que la eficacia de un relato está en función del auditorio ante el
que se argumenta. En este trabajo se ha intentado poner de manifiesto
que sólo se alcanza a comprender la verdadera contribución de la narrativa
si nos situamos, no tanto en el plano de los hechos, como en el
plano de la normatividad. La tesis que aquí se sostiene es que la utilidad
del enfoque narrativo está en función del valor arquetípico del modelo
o estándar de conducta que eventualmente contenga una determinada
narración. Entronca así directamente con la noción de razón práctica,
más allá de sus específicos puntos de conexión con algunas de las metodologías
bioéticas más importantes.
Abstract: Every fact must be narrated in order to be subject of value
judgement. But this value judgement depends partly on how that fact
is narrated. Some authors have highlighted the democratic value of the
narrative approach, because of its admission of different points of view
to construct a story. The problem is that these points of view can easily
lead to alternative solutions o even opposing ones. This phenomenon is
not rare in our multicultural society. From an strictly narrative point of
view, the best story is the most persuasive. But this lead us to relativism,
because the efficacy of an story relies on the audience towards the
argumentation is developed. In this work we have tried to bring to light
that the genuine contribution of the narrative approach is not achieved
if we stay on the level of facts and we do not pass to the level of normativity.
We suggest the thesis that the utility of narrative approach is a
function of the archetypical standard of behavior that a story may content.
So this approach, beyond its specific connections with some of the
most prominent bioethical methodologies, become directly connected
with the notion of practical reason.