Abstract
El arquitecto sevillano Fernando Rosales, cuya vida profesional se desarrolló a caballo entre los siglos xviii y xix, fue uno de los más activos maestros mayores de obras de la Iglesia de Sevilla. De carácter afable, tuvo sin embargo algunos sonoros desencuentros con el arquitecto José Echamorro, que aquí se exponen. Y al igual que ocurrió a sus compañeros en el cargo, la Real Academia de San Fernando rechazó sus proyectos enviados a dicha institución. Eclipsada por la de Antonio de Figueroa y José Álvarez, el estudio monográfico de su obra está aún por abordar. Este trabajo pretende contribuir a su conocimiento, mediante la aportación de numerosas noticias inéditas, tanto biográficas como profesionales, algunas de las cuales subsanan persistentes errores historiográficos, contextualizándolas entre sus más conocidas realizaciones.