Abstract
El artículo aborda el fenómeno de la llamada derecha alternativa de Estados Unidos, que ha experimentado un auge considerable con la campaña y victoria electoral de Donald Trump en enero de 2017. A pesar de que se trata de un movimiento relativamente heterogéneo y no siempre bien definido ideológicamente, su búsqueda de una singularización identitaria de carácter excluyente permitiría abordarlo de forma unitaria. Al mismo tiempo, el artículo plantea la necesidad de entender la irrupción de esta nueva derecha a partir de algunas de las características propias del sistema democrático-capitalista en el que nace. Así, la negación de una identidad humana propiamente dicha, con su correlato de afirmación de la proliferación identitaria, un sistema preferentemente formal de derechos, un acentuado individualismo y el enconamiento de la competencia social a raíz de la crisis económica, pueden encontrarse entre sus raíces explicativas.